Se acabó lo que se daba y llegó el día más temido de toda excursión: el regreso. El más temido para los alumnos y el más deseado para los profes, es broma, o no. Día más bien relajado, pues despues de desayunar, tan solo paramos en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial y en La Bañeza para comer. Mañana sigo, pero hoy os dejo las fotos y me voy a descansar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario